Cómo afrontar una situación de dependencia
El seguro para la situación de dependencia es el enfoque más actual introducido en el sector de los seguros sobre la vida.
Por desgracia, nadie está libre de caer en una situación de dependencia. Esta puede ser causada por enfermedad, accidente, o por la propia vejez.
La póliza de dependencia tiene como objetivo proporcionar recursos con los cuales se pueda disponer de una calidad de vida adecuada en caso de llegar a ser persona dependiente.
La persona dependiente, por sus problemas de movilidad y salud, de manera inevitable debe afrontar unos mayores gastos para desenvolverse en su vida diaria.
Gastos en equipos especiales de movilidad; adaptación de la vivienda o compra de una nueva si no es posible lo primero; ayuda permanente o semipermanente de una persona para realizar tareas elementales como vestirse o asearse; traslado en vehículos especiales; atención y gasto médico elevado, etc.
Todo lo anterior requiere de un elemento: dinero para afrontarlo dignamente, complemento de la pensión que puede cobrar la persona, seguramente insuficiente para sus necesidades,
La situación de dependencia se establece en varios grados
Existe una situación de dependencia Grado I, con repercusión más leve en las personas, por ello, los productos aseguradores vienen a cubrir los grados en los que la persona no puede valerse por sí misma para la mayoría de los actos de la vida diaria, son los grados de dependencia II y III.
El grado II de dependencia
Son dependientes de grado II, quienes requieren asistencia con diversas actividades elementales de la vida diaria, dos o tres veces por día; no obstante, no requiere la ayuda continuada de alguien para ofrecer soporte.
Esto también sucede cuando tiene una necesidad limitada o bien intermitente de ayuda.
Asímismo, se produce cuando se tienen necesidades de apoyo intermitente o limitado para su autonomía personal.
El grado III de dependencia
El grado III de dependencia ocurre cuando se necesita disponer de apoyo para realizar diversas actividades elementales de la vida ordinaria, unas cuantas veces al día.
Además, debido a que han perdido completamente el autocontrol físico, intelectual, mental o sensorial, necesitan el apoyo presencial continuo de un ayudante; o se necesita apoyo general para su autonomía individual.
Lo que ofrece la cobertura del sector asegurador
Básicamente, encontramos dos conceptos a la hora de las prestaciones del seguro de dependencia:
- El cobro de una cantidad única de dinero si se produce la situación
- El pago de una renta cada mes de por vida
El cliente elige, a la hora de contratar una póliza de dependencia, si prefiere una u otra modalidad.
En definitiva, ¿interesa contratar una póliza de seguro de dependencia?
Pensemos en una persona que sufre un accidente laboral grave, como puede ser un trabajador de la construcción, y las secuelas lo dejan en situación de dependencia. El cobro de una renta mensual, de por vida, le ayudará a afrontar los gastos de su situación.
Otro caso, frecuente en nuestros días como enfermedad grave, es el accidente cerebrovascular (ictus) que incapacita a la persona hasta llevarla a ser dependiente. Las causas de la dependencia son infinitas.
No vamos a ponernos trágicos, pero es evidente que todas las personas tenemos la probabilidad de caer en esta situación. Por ello, es recomendable prevenirse, sea cual sea la edad que se tenga e independientemente de la actividad laboral que desempeñe.
Contis Seguros – Cómo afrontar una situación de dependencia